Las propiedades de las semillas de cacao son en gran medida las responsables de que el chocolate sea una fuente de activos de un gran valor con una vasta gama de aplicaciones cosméticas. Tiene una composición bioquímica muy rica, contiene más de 800 moléculas con propiedades hidratantes, tonificantes, regeneradoras y revitalizantes. En términos de belleza, el chocolate aplicado en la piel es un excelente aliado, pues sus semillas son ricas en xantina y teobromina, las cuales son ideales para oxigenar los tejidos y así evitar los signos de envejecimiento. .