El aceite esencial de Sándalo es denso, de color amarillo que varia del claro al oscuro, de olor muy suave, amaderado y dulce. Es un afrodisíaco natural y es utilizado también como calmante y tranquilizante.
Sus orígenes son antiquísimos. En la medicina china el aceite de sándalo era utilizado para tratar dolores estomacales y problemas de piel, ya que consideraban que era un propulsor de la longevidad y un fortalecedor de la inmunidad del cuerpo hacia las enfermedades.
Una curiosidad importante es que el mejor sándalo que existe (el que buscan en su afán de conseguir la alquimia perfecta los perfumeros) es aquel que se extrae del árbol a partir de una edad superior veinticinco años, por eso el árbol no se procesa hasta que tiene unos treinta años aproximadamente.
Luego los troncos se dejan a merced de unas hormigas blancas que se comen la corteza y las capas recién formadas dejando al desnudo el núcleo del tronco que es ahí donde está el aceite.
Resumiendo el aceite esencial de Sándalo enriquece nuestra fuerza interior y equilibra nuestras emociones. Un viejo pensamiento hindú nos aconseja... "procura ser como el Sándalo que perfuma el hacha que lo hiere"
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